Había una vez dos querandíes que se querían mucho,mucho...
Ellos se llamaban Tizy y Canan, su amor estaba en pie porque tenían “La piedra del amor”.
Y se decía que el que la tenía conseguía el amor infinito de las personas.
Los otros querandíes querían la piedra, uno de ellos dijo:
-Yo quiero esa piedra.
Ellos respondieron:
-¡Pero fuimos nosostros los elegidos!
Entonces empezaron a correr y a correr...y luego a caminar hasta que llegaron a un lugar con muchos árboles. De repente aparecieron los querandíes del otro grupo. Los rodearon, después los durmieron y los ataron.
Cuando a la mañana siguiente se despertaron Tizy le confesó que era hechicera y el también le dijo que era hechicero. Entonces hicieron un hechizo para convertirse en pájaros y guardaron la piedra del amor en su nido.
Desde ese día todas las personas que pasan por allí observan en ese árbol una pareja de pájaros muy enamorados. Ella tiene siempre un flor en el pico como usaba Tizy en el cabello y él, en su cola lleva tres plumas rojas como usaba Canan para adornar su cabeza.



Jimena Severiens